Algunos caracteres distintivos del género:

Flores sin espolón, labelo sin espéculo.
Labelo dividido en hipoquilo y epiquilo, éste último colgante (ver diseño de Serapias).

La estrategia de polinización es Serapias resulta ciertamente curiosa. Mientras que otras orquídeas se has especializado en el arte del engaño y se afanan en atraer insectos polinizadores simulando ofertas de polen (por ejemplo en Cephalanthera longifolia), néctar (la mayor parte de las Orchis) o incluso encuentros sexuales (típicamente las Ophrys), Serapias se comporta más bien como un agradable motel de carretera que ofrece cobijo nocturno. Los elementos de la flor de Serapias se han soldado conformando un tubo más o menos amplio con una abertura superior.  Se ha constatado que la temperatura en el interior de este tubo resulta varios grados superior a la temperatura ambiente, por lo cual debe resultar un buen refugio para pasar la noche y las primeras horas del día. El reclamo se complementa con una aceptable imitación de los nidos que excavan en tierra las hembras de ciertas abejas y avispas solitarias, de manera que el color de las flores recuerda al de estos agujeros-nidos y su aroma parece ser similar al de las feromonas sexuales de estos insectos (más info en Velasco Ortega, L. y J. Beltrán Barea, 2004).