Polyommatus
celina
Nos encontramos seguramente ante el licénido más común de todos y con más amplia distribución. Durante mucho tiempo se consideraba que esta especie era
Polyommatus icarus, pero recientes investigaciones han determinado que ésta última se distribuye por los dos tercios más al norte de la península mientras que
Polyommatus celina abarcaría su tercio meridional, al que ha arribado recientemente desde el norte de África. Precisamente por el extraordinario parecido entre ambas especies y por la procedencia de P. celina se la ha denominado con el nombre popular de
Ícaro moro.
En nuestra comarca, sólo se podría confundir con
P. thersites y con
P. escheri, pero éstos carecen de punto en la celda. Sólo
P. celina tiene además de ese punto en la celda, aunque acompañado con otro punto junto a él, a veces hasta dos (ver fotos 4, 5 y 8 de la Galería), unas fimbrias uniformemente blancas. (Ver
Clave Visual de Licénidos). La presencia de otro punto acompañando al punto en la celda le ha dado también el nombre popular de
Dos puntos.
La puesta de la hembra se realiza sobre leguminosas como
Trifolium,
Lotus...., que constituyen las plantas nutricias de sus larvas.
GALERÍA
DE IMÁGENES
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Comentarios, anotaciones y referencias. ↑
Recomendamos el libro de
Miguel G. Muñoz Sariot, "
Biología y ecología de los Licénidos Españoles" (Edición del Autor, Granada, 2011), un completísimo estudio de todos los licénidos presentes en nuestra península.
Asimismo, recomendamos la consulta de "
Mariposas diurnas de la Gran Senda de Málaga", de
José Manuel Moreno-Benítez (editado por la Diputación de Málaga, 2018), y disponible en pdf en el siguiente enlace
Mariposas diurnas de la Gran Senda de Málaga, que nos permite a través de sus fichas descriptivas el reconocimiento de todas aquellas especies que el autor ha podido ir identificando en nuestro entorno. Ícaro moro, pag. 150 y 151.
Del mismo autor,
J.M. Moreno-Benítez, en edición impresa, "
Atlas de distribución de las mariposas diurnas de la provincia de Málaga" (2015). Ícaro moro, pag. 150 y 151.