La más espectacular y frecuente de las Lasiommata. Inconfundible por la sucesión de grandes ocelos amarillo-anaranjados y negros, pupilados en blanco, que presentan sus alas posteriores. La Saltacercas los posee, a diferencia de la Pedregosa, de parecidos tamaños. Para separarla de esta última hay que fijarse además en las líneas que atraviesan la celda y en el ocelo apical de las alas superiores.
Muy común en toda en la Península Ibérica, y también en la Serranía de Ronda. La podemos encontrar en casi todo tipo de ambiente, caminos, claros de bosques, laderas... Nosotros la hemos localizado a diferentes altitudes, desde la Sierra de las Nieves hasta la meseta de Ronda y el Valle del Genal.
Es también muy común junto a vallas y tapias; precisamente de su costumbre de volar continuamente a ambos lados de ellas le viene su nombre popular de Saltacercas.
Machos y hembras son relativamente fáciles de distinguir entre ellos, pues la hembra es más clara y no presenta androconias como los machos. Las fotos 2 y 5 de la Galería corresponden a hembras, como se puede deducir de la ausencia de dichas androconias.
Podemos encontrar a sus orugas, verdosas y con puntos blancos, sobre sus plantas nutricias, diversas gramíneas como Poa sp., Dactylys sp., y Festuca sp.
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